Aunque han cambiado de formas y modos, ambas Españas siguen existiendo.
Cierto es que hoy día, nazcas dónde y de quién nazcas, con mucho esfuerzo y sacrificio (salpicado con una buena dosis de suerte), cualquiera puede llegar a dónde se proponga, o cuando menos, a vivir mucho mejor que sus ancestros. Pero las diferencias siguen ahí, no sé si más, menos, o igual que hace 50-100 años.
Grandes ejecutivos, consejeros delegados, presidentes de no sé qué y cuántas cosas más; gente improductiva que ni fabrica ni aprieta un tornillo en su vida. ¿Cobrán tanto por saber mucho? Tal vez ¿tener un duro trabajo que mina la salud y la vida? ¿Será que con su labor nos hacen a los demás nuestras vidas más cómodas y placenteras? No. No. No. Nada de todo eso. Viven por y para la oligarquía, para aumentar sus beneficios, especular, engañar fingiendo que son necesarios. Bueno, lo son: para los que más tienen y hacer que cada vez tengan más. ¿En verdad necesita para algo un parado o un mileurista a un broquer? ¿Inversionista? ¿Consejero o Presidente, Vocal o lo qué sea de cualquier Banco, multinacional o cueva de ladrones similar? Lo necesitan los millonarios, para defraudar a Hacienda, buscar paraisos fiscales, rentabilizar el producto de sus especulaciones o lo que, directamente, han robado, eso sí, con mucho estilo y elegancia. Malditos mangantes dañinos para el género humano. Los unos y los otros.
Mientras, los demás, mileuristas o poco más, parados, amas de casa, discutiendo de banalidades. Si mi pueblo es mayor que el tuyo, mi autonomía tuvo bandera y estado propio, el trabajo nos lo quitan los parias venidos del 3º mundo (hasta aquí hay niveles: a algunos tenemos la desfachatez de calificarlos como ilegales), el partido al que voto roba menos que al que votas tú, y un larguísimo etc. en el que nos zambullimos con fruicción, para deleite de los que nos manejan y roban.
Los que más ganan son los que más producen para los ricos, no los más productivos o beneficiosos para la sociedad. Nadie es millonario por estudiar 10 carreras universitarias si con eso no enriquece aún más a alguien. Ni por tener el peor o más duro trabajo que exista, porque siempre habrá "muertos de necesidad" para realizarlos. Sólo son ampliamente recompensados los que trabajan directamente para el Capital. Aparte de los mencionados más arriba, se podría incluir a futbolistas, deportistas de élite, ciertos actores y artístas vendidos al capital, presentadores de tv al servicio de ciertos grupos, etc.
¿Los demás? Les da igual, para ellos sólo somos "masa sucia".
Para ver mi anterior entrada relacionada con este tema haz click AQUÍ.
viernes, 2 de octubre de 2009
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