Hambre-2

Hace poco mas de un mes colgué una entrada titulada "hambre-1" sabiendo que volvería a tocar este horripilante tema.
Con la actual y provocada crisis económica-financiera, sabía que las cifras que di pronto quedarían obsoletas, y hace muy pocos días leí que ya son ¡más de mil millones! las personas subalimentadas. No me atrevo a hacer una sencilla regla de tres: si pasando hambre 840 millones mueren 35 millones....por 1.000 millones morirán....... Si antes morían de hambre 25.000 personas cada día, ahora........ Y si cada 5,5 segundos moría de inanición un niño menor de 5 años, ahora ............ Las cuentas las puedes hacer tú mismo.
Muchos de los paises donde se dan las terribles hambrunas son ricos en materias primas, pero sólo revierten sus ganancias en una muy, muy pequeña élite que, o bien sostiene a sus corruptos gobiernos, o directamente son ellos los gobernantes. Las supuestas democracias occidentales podrían intervenir, por supuesto, pero no lo hacen pues tambien sus grandes empresas, monopolios, y consumidores, se benefician con ese estado de cosas. Los muertos de hambre no votan.
Muchos paises "pobres" son grandes productores agrícolas, pero no pueden exportar a los paises ricos, pues esos mismos productos allí están subvencionados por los gobiernos. Así, pueden comprar tecnología y artículos de consumo (siempre las élites, claro) pero no pueden exportar nada.
Siempre oí que la tierra de cultivo necesita del barbecho, dejándola recuperarse en su contenido esencial de sales minerales, y por eso el habitual paisaje de tierras cultivadas al lado de otras en espera, alternativamente. Pero cuando, muy recientemente, se ha especulado con el negocio de los biocombustibles, leí con sorpresa que se podían aprovechar los barbechos para producir masa vegetal convertible en biocombustible. Es decir, no se pueden aprovechar para dar de comer a los que literalmente se mueren de hambre, pero sí para mover nuestros malditos vehículos a motor.
Alguien es el culpable de todo esto, y bien se aprovecha de ello, pero los demás no somos más inocentes al permitirlo y hacer que todo siga igual.
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